El actual equipo de
gobierno municipal de Jaca ha hecho que varias generaciones de
jacetanos presenciaran la pasada primavera como se desalojaba “de
malas maneras” el quiosco de Manolita, el lugar por el que todas
esas jacetanas y todos esos jacetanos, algunos que ya peinan canas y
otros algo más jovencitos, han pasado durante los últimos cincuenta
años, casi a diario, a comprarse las chuches, a entablar amistades,
a jugar con los amigos, a divertirse con las bicicletas, los
columpios y el balón e, incluso, conforme iban cumpliendo años, a
“ligar”. Todo aquello hizo, lógicamente, que todos aquellos
jovenzuelos que ahora viven en Jaca y que ya son, la mayoría,
“respetables” padres de familia, sientan como algo suyo el
célebre quiosco de Manolita. Tienen un especial cariño por Manolita
y Manolita por ellos porque les ha visto crecer...
Bueno, pues tampoco se
sabe muy bien la razón, porque no la han sabido explicar todavía,
por la que al actual equipo de gobierno del ayuntamiento jaqués,
perteneciente al Partido Popular, liderado por el alcalde Barrio y
secundado por el concejal del ramo, en este caso, el teniente de
alcalde Funes, les entraron unas prisas enormes, allá por la
primavera, para “desalojar” a la familia que llevaba todos esos
años, toda una vida, regentando el quiosco. Entonces dijeron que
tenían en marcha un proyecto que iba a mejorar sustancialmente tanto
el servicio del quiosco como el entorno del Paseo. Cosa que, aunque
nos parezca muy bien (porque este parque, dicho sea de paso, necesita
ya una urgente modernización para que pueda aprovecharse de verdad
por los jacetanos), pero eso no quita ni justifica, como decíamos,
las malas maneras que se usaron para pedir a los actuales inquilinos
del negocio que se marcharan. Entonces se argumentaron necesidades de
plazos para iniciar el proyecto de manera inmediata como
justificación de las prisas.
Han pasado ya cinco
meses. El quiosco sigue cerrado e inutilizado, no ha servido para
nada; no se ha hecho ni una sola actuación mínima que sirva para el
proyecto y tampoco, por supuesto, se ha conseguido ni una sola
subvención o aportación económica o financiera de ninguna
institución que pueda cubrir la financiación de ese proyecto
anunciado y que, efectivamente, puede ser muy bueno para Jaca y los
jacetanos. Es decir, en resumen, no se ha hecho nada. Como ya nos
tiene acostumbrados el actual equipo de Barrio, con el alcalde a la
cabeza, el máximo responsable, se ha perdido el tiempo una vez más
en la gestión pública de Jaca y Jaca, que somos todos (aunque el
alcalde todavía no se haya enterado), gracias al alcalde y su
“séquito”, ha perdido una nueva oportunidad de futuro y ha
perdido una mejora sustancial para la ciudad; ni el alcalde ni su
equipo han sido capaces de poner en marcha este proyecto, lo mismo
que ya les ha pasado con otras cuestiones importantes que la ciudad
necesita y que con este equipo de gobierno Jaca seguirá perdiendo y
no tendrá nunca porque, como ellos mismos demuestran, son incapaces
de gestionarlo ni de conseguirlo. Ya llevan más de tres años
gobernando y han sido incapaces de poner en marcha ni un solo
proyecto: el Palacio de Congresos sigue sin ser un palacio de
congresos, ahora ya ni tiene cine en verano y encima nos cuesta
24.000 euros más al año a los jacetanos porque los inquilinos que
pagaban se han marchado “hartos” de aguantar la insidia
municipal, los contadores del agua siguen sin colocarse por lo que
Jaca “pierde” más de un millón de euros al año, se perdieron
las subvenciones para la ampliación de la guardería, el cuartel de
la policía local sigue sin inaugurarse, el centro de juventud y ocio
(cuya inauguración ya anunciaron para febrero de 2012), al final, lo
inaugurarán los nietos de los jóvenes que respondieron a la
encuesta sobre gustos, necesidades y preferencias para dotar de
equipamientos al centro..., etcétera, etcétera. Es decir, han sido,
en tres años incapaces de llevar a cabo un proyecto medianamente
beneficioso para la ciudad y han perdido, además, cuantiosas
cantidades económicas de subvención de otras administraciones que
anteriores ayuntamientos ya habían conseguido.
En fin, tristemente y de
malas maneras “Manolita” se fue... pero lo todavía más grave es
que si depende del actual alcalde, casi un monumento andante a la
ineptitud, y si continúa por mucho tiempo la gran capacidad de
gestión del actual ayuntamiento será, finalmente, en perjuicio de
los jacetanos, “para no volver...”