La seguridad del proyecto de Yesa continúa en entredicho
“La estupidez insiste siempre”, decía Albert Camus. Y la naturaleza siempre avisa. Eso no lo decía ningún pensador, pero es patrimonio de la sabiduría popular que tantas veces ha superado en sensatez a los grandes filósofos. Y es que el pensamiento empírico es, sin duda, la base de las grandes reflexiones e, incontestablemente, un baremo muy a tener en cuenta cuando nos empeñamos, una y otra vez, en ignorar las advertencias que preceden a las grandes catástrofes. Ha pasado una y otra vez. Disfrazadas de accidentes desafortunados, de casualidades imprevistas, las consecuencias de los grandes desastres siempre han llevado a sus espaldas explicaciones lógicas, informes ignorados y negligencias o errores humanos.
En el caso de los pantanos no iba a ser menos, y esta semana hemos presenciado de nuevo cómo, tras inversiones millonarias, ocho meses de actuaciones extraordinarias y medio centenar de familias desalojadas, las laderas del pantano de Yesa siguen experimentando deslizamientos y agrietamientos mientras los responsables del proyecto, a la sazón, el staff de la Confederación Hidrográfica del Ebro, para que no quede ninguna duda, llama a la tranquilidad y advierte de que continuará con su polémico proyecto de recrecimiento. Con la opinión de investigadores y expertos en contra, saltándose a la torera las advertencias de ingenieros extranjeros independientes y a pesar de los informes técnicos realizados por el propio organismo autónomo de cuenca.
Y en el mes en el que se cumplen los lamentables aniversarios de algunas de las catástrofes más graves relacionadas con embalses, pantanos y proyectos faraónicos para dominar a la naturaleza, cobran actualidad y relevancia especial las advertencias y avisos que, desde hace años, ponen en entredicho la viabilidad, o al menos, la seguridad, del recrecimiento de Yesa y del propio pantano jacetano. Avisos que ya causaron la paralización de las obras de su construcción en 1930. Unos prefacios, indudablemente, de nada bueno, que volvieron a ponerse de manifiesto a partir de 2003, cuando los fundamentos del recrecimiento eran ya más que rebatibles. Se mueven las laderas, a más o menos velocidad. Se producen importantes deslizamientos de tierra. Se fotografían grandes cárcavas después de los movimientos del terreno y somos testigos de grietas en las carreteras en las que cabe un brazo entero. Y, por si fuera poco, se desalojan casas y se crea un plan de evacuación para los pueblos cercanos. Insistimos: ¿necesitamos más señales?
Demasiadas coincidencias: corrimientos de tierras y deslizamientos previos a la catástrofe, informes advirtiendo los problemas geológicos,… ¿Más señales? Y lo mejor de todo es que la catástrofe, que se podría haber evitado, quedó impune. No hubo responsables ni políticos ni técnicos. La máxima condena fue de 3 años para un par de ingenieros.
http://oph.chebro.es/DOCUMENTACION/Congresos_Seminarios/Laderas2007/Ponencias/8%20Vaiont%20.pdf
No es el único caso. Tal día como hoy, en 1982, tuvo lugar la pantanada de Tous. 30 muertos. Consecuencia de un fallo eléctrico. Tras cuatro juicios, el Tribunal Supremo declaró la responsabilidad patrimonial directa del Estado por funcionamiento "anormal" del servicio público en las actuaciones que determinaron la rotura de la presa. La escasa vigilancia y control y la inexistencia de una red de alerta para prevenir la avenida de las aguas son las negligencias sobre las que se sustentó la sentencia, que condenó a dos ingenieros del Estado a un año de prisión por el delito de imprudencia temeraria por la omisión de sus deberes profesionales y declaró la responsabilidad civil del Estado para el pago de las indemnizaciones. También, durante su construcción, se dieron contrariedades más que serias. Las dificultades geológicas surgieron ya en los inicios de la obra en 1958. Durante esos años, se dieron problemas con la cimentación en la zona central del cauce al existir una falla geológica de dimensiones excepcionales que desvirtuaba las previsiones adoptadas en los estudios previos, lo que motivó la paralización de las obras en diciembre de 1964. La construcción se reanudó en septiembre de 1974 y, cinco años después, la infraestructura estaba prácticamente terminada. El 20 de octubre de 1982 el nivel en el embalse superó la cota de coronación, lo que provocó la erosión del cuerpo central de materiales sueltos y la destrucción, prácticamente completa, de esta parte de la presa. Además, las compuertas de los aliviaderos no pudieron ser correctamente abiertas.
Más precedentes: la mayor catástrofe de las acontecidas en España hasta hoy tuvo lugar el 30 de abril de 1802. Al menos 608 muertos (víctimas oficiales; la cifra real no se conocerá nunca). En el momento del accidente el pantano de Lorca (Murcia) era el más grande de Europa y todavía se especula, además de con la hipótesis del sabotaje, con que la presa sufriera un fallo técnico al ser construida en un terreno arenoso pese a los informes negativos de algunos arquitectos. El máximo responsable de la presa murió como consecuencia de la riada.
http://www.laverdad.es/murcia/20080430/local/lorca/cumplen-anos-rotura-pantano-200804301234.html
Y nos queda la rotura de la presa de Vega de Tera, en Zamora, más conocida como la catástrofe de Ribadelago, pueblo que quedó arrasado por las aguas el 9 de enero de 1969. 144 muertos. La segunda mayor tragedia en España en cuanto a número de víctimas mortales por la rotura de un embalse. Vega de Tera es un pequeño aprovechamiento hidroeléctrico situado en la comarca de Sanabria, que forma parte de un sistema más amplio de lagos artificiales y canales denominado Salto de Moncabril. Más de 150 metros del muro de contención de la presa se derrumbaron. El pueblo, situado ocho kilómetros río abajo, fue rápidamente alcanzado sin dar apenas tiempo a los vecinos. Muchas de las edificaciones fueron destruidas por el agua y tan sólo fue posible recuperar 28 de los 144 cuerpos desaparecidos entre las aguas del lago de Sanabria. Según testimonios de trabajadores del embalse, las instalaciones tenían graves deficiencias estructurales como consecuencia de una mala construcción, como también se recogió después en un proceso judicial que más pareció una pantomima que otra cosa. Cimentación superficial en algunos contrafuertes, mala calidad geológica,… La sentencia condenó en exclusiva a un encargado de obra, mientras que los directivos de Hidroeléctrica Moncabril, la titular de la explotación, señalados en el proceso judicial, resultaron con penas de privación de libertad tan exiguas que nunca ingresaron en prisión y, tras los recursos interpuestos, fueron indultados por el Gobierno. El régimen franquista nunca depuró a los posibles responsables políticos e intentó en todo momento minimizar el alcance de la noticia de la catástrofe.
Claro, visto así, sale relativamente
barato ser negligente, autócrata, temerario e imprudente. Y si por el camino
hay otro tipo de aprovechamientos en especias o favores, pues cómo no se va a
dar este tipo de testarudeces. Siempre hay un informe al que agarrarse, con el
que cubrirse las espaldas si sucediera algo, que con un poco de suerte no tiene
por qué pasar, un expediente oportunamente redactado por alguien carente de
escrúpulos y de conciencia ligera. Un documento ambiguo al que el político de
turno se agarra como a un clavo ardiendo para defender lo indefendible, para
salirse con la suya por cojones o por influencia, como se dice por estos pueblos…
No entendemos, de otro modo, que se den situaciones como la de Yesa, con todos
los factores en contra, económico (el presupuesto inicial se ha disparado
infinitamente), social (la resistencia de los propios afectados, la evacuación
de los vecinos de las urbanizaciones
afectadas, los movimientos en defensa de la montaña,…), la impotencia de los
que se tienen que ir de sus tierras... Daños colaterales, pensarán los
responsables de esta barbaridad geológica, arquitectónica y demográfica, que se
pueden apagar a golpe de GEO y de porra y de cargas policiales contra el pueblo
más desprotegido… Como en los mejores tiempos de la historia de este país.
Inaugurando pantanos y acallando al pueblo con mano dura y sin argumentos. Qué
le vamos a hacer: la estupidez insiste siempre. Que parezca un accidente...
Los datos que anteceden indican que el tamaño del desastre, depende de la población que vive aguas abajo, en este caso hay una población muy importante, Sangüesa, que parece que están callados o al menos poco motivados a poner el grito en el cielo, si esas voces se unen a los sufrientes directamente afectados, es seguro que consiguen que sus gritos de protesta lleguen donde tienen que llegar.
ResponderEliminarEsa obra es altamente peligrosa y parece que el interés de los regantes, está por encima de cualquier seguridad. Alguien dijo hace muchos años que el agua de Yesa podría llenar pequeños pantanos que pueden hacerse en los valles que se encuentran al sur, esto no fue escuchado y así nos va, gastando miles de millones en obras que algún día se pararán, todo por no haber hecho una valoración real del terreno.
Siempre digo lo mismo, ojalá no pase nada por el bien de todos, aunque cada vez tiene tintes más preocupantes, pero si pasa, aquí no hay maquinista a quien echarle la culpa ...
ResponderEliminarYa pagará el ingeniero de turno, como ha pasado otras veces, primero les pagan para que sigan sus instrucciones y luego les cubren para que hagan de cabeza de turco e indulto que te crió o lo que haga falta... Los políticos, mientras las leyes que hacen ellos mismos no les paren los pies, siempre se "escaquean"...
EliminarCada vez es mas vergonzoso lo que pasa en este pais con todo , luego llega la catastrofe y siempre pierde el mismo, el resto foto y aqui no ha pasado nada y a por otra.
ResponderEliminarAragon tambien tiene set que leden por el culo al pantano ? Aupa ARTIEDA ?
ResponderEliminarImagino que ahora informarán sobre que se ha ampliado en 15 millones el presupuesto para la mejora del embalse de Yesa por parte del Consejo de Ministros, ampliando de 10 a 25 millones la dotación para estos trabajos, tras detectarse deslizamientos en febrero. Anda, parece que se han olvidaddo de esto después de su post. De cómo publicar un post y olvidar publicar al completo las noticias y actualizarlas para que se sepa toda la verdad.
ResponderEliminarhttp://www.heraldo.es/noticias/aragon/2013/10/25/ampliado_millones_presupuesto_para_mejora_del_embalse_yesa_254433_300.html
En esta vida no todo se arregla con dinero, ni todo son conspiraciones ni manipulaciones, afortunadamente. Tampoco se puede comentar sectariamente porque, en este caso, está visto que da lo mismo 15 que 50; está claro que no es un problema económico (cómo va a serlo, si ya se ha triplicado el presupuesto inicial sin ningún reparo), y está claro también que el problema no se soluciona con esta aportación a la que parece estamos obligados a aplaudir. No es un problema de dinero. Es un problema de falta de consenso, con muchas voces críticas en contra (incluidas las de técnicos, ingenieros, geólogos, expertos y profesores universitarios). Y un problema, sobre todo, de falta de seguridad que se ha obviado y que tiene a un montón de familias desalojadas mientras se intenta por todos los medios estabilizar una ladera que, si nunca se hubiera tocado (al menos en los términos que se ha hecho), nunca se hubiera movido. Eso es un hecho, no teorías de la conspiración ni tinglados similares, que suelen venir muy bien para tapar lo realmente importante pero políticamente menos correcto. Por cierto, parece que nuestra visión del asunto es compartida por muchos:
Eliminarhttp://www.pirineodigital.com/noticia.php?idnot=1658
http://www.radiohuesca.com/noticia/501924/Rio-Aragon-afirma-que-no-hay-garantias-para-la-estabilizacion-de-la-ladera-de-Yesa
Efectivamente, hay que escuchar a todas las partes antes de forjarse una opinión al respecto. Ante éste y ante cualquier otro asunto. Porque si no se hace así, lo más que se consigue es un esbozo frustrado de manipulación que no lleva a ninguna parte más que a la desacreditación del que pretende desinformar. En su mismo lenguaje, sería hablar "De cómo criticar un post y olvidar publicar todo lo que no es inversión económica para impedir que se sepa toda la verdad".